LA MUJER Y LA LUNA
En la naturaleza los ciclos se repiten una y otra vez, como un ritual. En el frío del invierno, la naturaleza se toma un descanso, los árboles abandonan sus hojas, los animales hibernan, el día se acorta. Luego llega la primavera, a renovar esperanzas mientras aumenta lentamente la temperatura y comienzan a florecer las plantas y los animales a buscar reproducirse. El verano trae energía y vida a pleno, plantas llenas de hojas y frutos maduros, nos invita a estar al aire libre y a comer más liviano. Luego el otoño, nuevamente llega a instalar la quietud, se comienzan a secar las hojas y todo vuelve a comenzar.
Así también, la tierra gira alrededor del sol siempre igual, el día precede a la noche, las mareas tienen sus tiempos.
De la misma forma, la luna tiene su ciclo, son veintiocho días en los que va cambiando su forma y su energía. Y según el Ayurveda, la medicina tradicional hindú, el ciclo de la luna tiene una influencia directa y una relación estrecha con la mujer. Se dice que el hombre es solar y la mujer es lunar.
La energía de la luna es femenina. Se equipara al ciclo femenino de ovulación que también son veintiocho días. El Shakti Prana, o energía femenina de cada mujer existe en su útero, y en las tradiciones femeninas antiguas, los rituales de las mujeres en torno a la luna tenían gran importancia y sabiduría. Cada mes la mujer tiene la oportunidad de desprenderse de emociones tóxicas, y bloqueos físicos que ya no le son útiles. El cuerpo realiza una limpieza energética y se rejuvenece con cada período. Tener en cuenta los cambios que ocurren nos ayuda a las mujeres a vivir en armonía con nosotras mismas y nuestra energía ancestral.
Se dice que en cada mujer coexisten cuatro mujeres diferentes en un ciclo lunar:
La mujer de la Luna nueva
Cuando hay luna nueva, antiguamente se decía que era el momento natural de la menstruación, tiempo de purificación. Las mujeres se reunían a compartir este momento sagrado y a respetar el momento de baja energía en sincronía con la armonía de la naturaleza. Es un tiempo de reflexión, de introspección, de descanso.
En este período se aconseja que la alimentación con comidas simples y es un buen momento para escribir en un diario las intenciones para el resto del mes.
La mujer de la Luna en cuarto creciente
A medida que la luna crece, la energía se incrementa y las intenciones, las preguntas que nos hemos hecho y las contemplaciones internas, comienzan a tomar forma. Esta etapa simboliza la maduración del óvulo.
La mujer de la Luna llena
Este es el momento en que la mujer está más fuerte y con mayor energía, según la enseñanza del Ayurveda. Es el momento culminante de las intenciones que se gestaron en la luna nueva. Es tiempo de realizar actividades sociales, comenzar nuevos proyectos, superar los obstáculos, utilizando la energía externa, volcándose hacia el exterior y dando lo mejor de sí. El shakti prana está en su máximo nivel.